VERANO
de palabras BONITAS (Epifanía es la tercera)
Verano de palabras bonitas…palabras que evocan… En El último encuentro, Sándor
Márai escribe “¿Qué las palabras
no tienen importancia? Yo no me atrevería a afirmarlo con tanta seguridad. A
veces creo que muchas cosas, que todo depende de las palabras. De las palabras
que uno dice a su debido tiempo, o de las que se calla, o de las que escribe”.
Las palabras son lo que significan, pero también lo que evocan. En este
tiempo de verano, que nos invita a relajarnos y a descansar, os propongo algo
más ligero, un recorrido por algunas palabras hermosas, palabras que emocionan,
que evocan, que nos hacen sentir, que nos llevan a otros sitios. La tercera es …EPIFANÍA
Epifanía:
Un momento de sorpresiva revelación
“El verdadero viaje de descubrimiento no consiste
en buscar nuevos paisajes, sino en aprender a mirar con nuevos ojos”
(Marcel
Proust)
Además de su sentido religioso (manifestación o revelación divina), epifanía
es la palabra que nos sirve para expresar esa profunda sensación de
revelación que tenemos cuando comprendemos la esencia de las cosas, para
constatar que sentimos como resuelto, lo que era muy difícil de entender. La
palabra epifanía nos habla de revelación
de una verdad antes oculta, o secreta o desconocida, que se manifiesta. También
del placer de recorrer senderos escondidos, de la sorpresa de descubrir y de
encontrarse.
Epifanía es la revelación que surge de forma repentina y mágica cuando mantenemos una mirada
llena de curiosidad, cuando está intacta nuestra capacidad de asombro, cuando nos
dejamos sorprender por la vida; esa sensación indescriptible y única que reconocemos
cuando mantenemos viva la inquietud de preguntarnos siempre ¿dónde está la estrella?, de dar
sentido a lo que sucede aunque parezca no tenerlo, de buscar nuestro camino
sabiendo que es una búsqueda que no termina.
Esta es la última hoja de mi Moleskine del Camino de Santiago, sin duda
un momento de epifanía en mi vida...Seguro que recuerdas un momento tuyo...¿me lo cuentas?
..comprender que el camino es una metáfora de la vida
y que, por tanto, toda mi vida estaré en “camino”…siempre en camino…
Mirada activa, presencia consciente, despertar
permanente, observar y vivir cada detalle, descubrir paraísos en lo cotidiano, estar
al cien por cien,…¿Ingenuidad? no, sin duda, es una elección. Epifanía…“Sorprenderse
y maravillarse es comenzar a entender” (José
Ortega y Gasset).
Todos los besos