Serenidad Sosiego, tranquilidad, sin turbación física o moral (RAE)
“La serenidad no es estar a salvo de la tormenta, sino encontrar la paz dentro de ella” (Thomas de Kempis)
Equilibrio, sosiego, quietud, paz, tranquilidad, calma,… Una persona serena es una persona en paz y con paz, que sabe mantener la calma en los momentos difíciles y ante las dificultades, que prefiere actuar sin prisas, una persona que crea paz en su entorno .
La calma, la serenidad nos lleva a disfrutar de la vida, a disfrutar el momento, a la alegría y a la lucidez. La serenidad permite que pasemos del mirar al ver, del oír a escuchar, de la existencia a la presencia. La paz, la serenidad no es amiga de la prisa, no juega a querer resolver toda una vida en un minuto. está ligada a la calma interior, a la capacidad de atención plena. La serenidad no llega por casualidad, es una forma de vivir que se elige, se trabaja y se mantiene y eso requiere tiempo, esfuerzo y voluntad.
Cuando perdemos la serenidad, aparece la ansiedad, la agitación interna, la angustia, las prisas, el intentar hacer varias cosas al mismo tiempo, nos movemos mucho pero avanzamos muy poco. Nuestra mente comienza a estar en cualquier lugar menos aquí y ahora. “Lo que causa tensión es estar aquí queriendo estar allí, o estar en el presente queriendo estar en el futuro (Eckhart Tolle). A veces nos escudamos en el “soy así, no puedo evitarlo”, incluso hay personas que se identifican con esta cualidad y proclaman la frase con orgullo, como algo irremediable y superior a ellas. Cuanto más estresados estamos, más precipitación, más agitación tenemos y menos capaces somos de mantenernos ecuánimes. “La dicha humana reside en dos cosas: estar libre de enfermedades del cuerpo y libre de preocupaciones del espíritu” (Lin Yutang).
Para vencer esa situación, necesitamos ser conscientes y dedicarnos tiempo (porque el tiempo es un regalo) . Si pensamos un poquito, descubrimos que lo que nos cuesta es estar en lo que hacemos, al 100%. La capacidad de centrarse en el momento, en el presente nos lleva a la atención plena o mindfulness. Thich Naht Hanh es un maestro budista Zen que introdujo en Occidente el mindfulness o la práctica de la atención plena, vivir el momento presente. Cuando llegamos a este estado de concentración, todo fluye de manera natural, actúamos mejor y nos sentimos serenos y relajados
El primer regalo de este post: dos recomendaciones de libros que aportan calma: Adiós, ansiedad de David Burns y Es fácil dejar de preocuparse, de Allen Carr.
El segundo un video de Thich Naht Hanh, con algunas de sus enseñanzas.
El tercero, una canción “Aquí y ahora”, donde Coti canta que el mejor lugar del mundo es siempre aquí y que el mejor momento siempre es ahora
Cuando me siento a escuchar a alguien, esa persona y ese momento se convierten para mí en todo mi mundo. Huyamos de la mirada perdida de alguien que se siente obligado a escucharnos pero preferiría estar en otro lugar.
Todos los besos
