Cuando como, como y cuando duermo, duermo



Multitarea: El arte de prestar atención a varias cosas. Esta palabra no está en el diccionario de la RAE
“Hacer dos cosas a la vez es no hacer ninguna” (Publilius Syrus)

Creemos que somos mejores, más efectivos y capaces si realizamos varias tareas a la vez; sin embargo, la ciencia nos dice lo contrario. Nuestro  cerebro no trabaja de forma eficiente  en un entorno multitarea. Tiene capacidades limitadas como cualquier procesador de información y, además, tiene dos cuellos de botella: la atención y la memoria de trabajo, limitada y extremadamente susceptible a las interferencias. Cuando intentamos realizar dos tareas al mismo tiempo, se producen cruces de información y muchos errores.

La multitarea nos lleva a un estado de atención superficial. Es una ilusión creer que cuando whatsappeamos o revisamos las notificaciones de nuestras redes sociales mientras estamos en una reunión, en una conferencia o viendo una película, seguimos en profundidad lo que se dice o lo que sucede en nuestro entorno...Realmente, nos estamos perdiendo mucho…

Vivir en multitarea nos entrena para cambiar de foco rápidamente, hace que separemos las ideas con dificultad, que perdamos capacidad de memoria para retener ideas, palabras e imágenes y que nos equivoquemos más fácilmente. Reaccionamos ante estímulos irrelevantes que nos distraen. Nos despistamos más. Además, la multitarea nos roba espacios de reflexión. Nos seduce lo inmediato y hacer muchas cosas (hacer, hacer y hacer), incluso explotamos la coartada de la obligación, sin tener en cuenta que no hay nada menos productivo que el afán de la productividad, la vorágine de la hiperactividad sin sentido, que no nos aporta nada y que no es estrictamente necesaria. Cuántas veces decimos “Cuando acabe ésto…” y así pasan los días. La vida es más que la lista de tareas en la que estamos inmersos.

El regalo de este post es un test de atención…¡¡si tienes un minuto, merece la pena!!
La clave está en poner un filtro, distinguir entre lo que tenemos que afrontar, lo que es necesario organizar y las cosas que no hay que hacer. “Primero lo primero” (Stephen Covey). La atención es un recurso mental limitado y la hiperactividad genera ansiedad y estrés y nos hace perder conciencia plena sobre la propia vida. Querer hacerlo todo  no nos conduce a nada...¿A ti te pasa?...¿Probamos a darle mayor sentido a cada minuto de nuestra vida?.“Todas las cosas serán producidas en superior cantidad y calidad, y con mayor facilidad, cuando cada hombre trabaje en una sola ocupación, de acuerdo a sus dones naturales, y en el momento adecuado, sin inmiscuirse en nada más” (Platón).

“Cuando como, como y cuando duermo, duermo” (Proverbio zen).

Todos los besos