I sin den shin…mi silencio te envuelve, expresión zen que designa la comunicación silenciosa, de corazón a corazón.
Son las nueve de la noche. En esta época del año, va oscureciendo más temprano. El atardecer es tranquilo; el otoño es tan apacible para quién sabe oírlo…oír el silencio, el espacio entre las palabras, la calma en la tormenta , el paso del tiempo…Tengo curiosidad, ¿Cuál es el momento más silencioso que te ha regalado a vida?.
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Silencio...he tomado prestado para el título de este post, unos versos de un poema precioso de Pablo Neruda, El mar y las campanas. Respira hondo y saborea la paz de este instante, ¿preparado?
"Si cada día cae
dentro de cada noche
hay un pozo donde la claridad está encerrada
Hay que sentarse a la orilla
del pozo de la sombra
y pescar luz caída
con paciencia"
Pescar luz caída, con paciencia…seguir en paz en las situaciones tensas o en los vuelcos emocionales de la vida. Al silencio le encanta desplegarse en la soledad, esa soledad voluntaria, buscada, en la que aprendes deprisa, porque te permite mirar hacia dentro y recargarte antes de regresar al mundo.
Te regalo en este post un momento "sin hacer nada", un instante para desprenderte de tus pensamientos y de tus preocupaciones, un tiempo hecho de silencio, de calma y de presencia… saboréalo :-)
I sin den shin, mi silencio te envuelve.
Todos los besos
