Soy, del verbo contigo


Amor Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear (RAE).
 “¿Quieres que te diga algo realmente subversivo? El amor es tan bueno como parece. Realmente vale la pena luchar, ser valiente y arriesgarlo todo por él” (Erica Jong)
Según el profesor John Money, de la Universidad John Hopkins, cada persona tiene su “mapa amoroso” (love map), un mosaico de mensajes codificados en nuestro cerebro que explica nuestras preferencias sobre las características físicas, emocionales y espirituales de las personas que nos atraen, el tipo de cabello, el color de ojos, el tono de voz, la sonrisa, los gestos,  el olor  o la estructura corporal. También el tipo de personalidad, cálida y acogedora o fuerte y silenciosa…
AMOR…“Es hielo abrasador, es fuego helado, es herida que duele y no se siente, es un soñado bien, un mal presente, es un breve descanso muy cansado; es un descuido que nos da cuidado, un cobarde, un nombre de valiente, un andar solitario entre la gente, un amar solamente ser amado; es una libertad encarcelada, que dura hasta el postrero parasismo; enfermedad que crece si es curada. Este es el niño AMOR, éste es su abismo. ¡Mirad cuál amistad tendrá con nada en que todo es contrario de sí mismo” (Francisco de Quevedo). “Desmayarse, atreverse, estar furioso, áspero, tierno, liberal, esquivo, alentado, mortal, difunto, vivo, leal, traidor, cobarde y animoso; no hallar fuera del bien centro y reposo, mostrarse alegre, triste, humilde, altivo, enojado, valiente, fugitivo, satisfecho, ofendido, receloso; huir el rostro al claro desengaño, beber veneno por licor suave, olvidar el provecho, amar el daño, creer que en un cielo un infierno cabe, dar la vida y el alma a un desengaño; ésto es AMOR, quién lo probó lo sabe” (Lope de Vega).
El filósofo británico Alan Watss explicaba que “las palabras no pueden expresar más que un pequeño fragmento del conocimiento humano, porque lo que podemos decir y pensar es siempre inmensamente menor a lo que experimentamos”. “Necesitamos pocas palabras para expresar lo esencial; necesitamos todas las palabras para hacerlo real” (Paul Éluard). Quizá no sea coherente explicar con palabras lo que en sí mismo es inexplicable, así que no expliquemos mucho pero digamos TE QUIERO…
Hablamos de pequeñas cosas cuando hablamos de AMOR, de sentimientos auténticos y sencillos, de experiencias y vivencias con MAGIA. Cuando decimos te quiero, decimos cuánto nos importa esa persona, cuánto nos importa lo que hace, lo que le gusta, lo que le ocurre…cuando queremos a alguien, guardamos una parte de nuestra vida, de nuestro tiempo, de nuestra atención para ella. Cuando no decimos te quiero con palabras, existen muchas formas de decirlo: ¿estás mejor?, me acuerdo de ti, cuídate mucho cielo, ¿llegaste bien?, te extraño, vi esto y me acordé de ti, tienes las manos heladas, es preciosa esa foto, ¿cómo te fue hoy?, buenas noches, descansa…
La alexitimia es un rasgo de la personalidad que hace imposible a quién la tiene, detectar las propias emociones y, por tanto, darles un nombre para expresarlas verbalmente. Tienen emociones pero no saben reconocerlas y expresarlas con palabras o gestos. Un 10% de la población padece esta anomalía. Si estamos en el restante 90%, digamos TE QUIERO sin dar por hecho que la otra persona lo sabe. 
El primer regalo de este post, esta escena de la película, Tu vida en 65 minutos, …por qué te quiero en 65 palabras. Ella le había contado que cuando iba al colegio, un profesor siempre les pedía redacciones de 65 palabras, él le pregunta si son muchas o pocas y ella le contesta que depende de sobre qué tenía que escribir,…
El segundo regalo,…este video que forma parte de una campaña de publicidad de una marca de ropa y muestra a veinte personas que se acaban de conocer besándose. Se llama First kiss, primer beso, y ha sido visto por más de 37 millones de personas.

y éste parrafito con un diálogo lleno de encanto:
“-veo que tienes lunares
-sí, tengo muchos
-¿y pecas?
-sólo cuando te miro”.
Recordemos que la vida no se mide por las veces que respiramos,  sino por los momentos que nos dejan sin aliento y que no podemos hacer nada para que nos quieran y tampoco podemos hacer nada para dejar de querer.
Todos los besos