Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro



Leer: Pasar la vista por lo escrito o impreso comprendiendo la significación de los caracteres empleados (RAE). Leer, del latín legere que significa recoger y también elegir
 “En algún lugar de un libro hay una frase esperándonos para darle un sentido a la existencia"
(Miguel de Cervantes)
En Egipto, a las bibliotecas se las llamaba el tesoro de los remedios del alma,  porque curaban el peor de todos los males, la ignorancia…
Hace ya más de cinco años que tengo el gran privilegio de compartir tertulia cada mes con un grupo de personas  muy, muy especial  (¡Cómo os quiero!) y, de verdad, no hay nada más sorprendente que escuchar cómo cada una de ellas interpreta, siente y vive el mismo libro que hemos leído de manera tan diferente…“Los libros son espejos: sólo se ve en ellos lo que uno lleva ya dentro” Carlos Ruiz Zafón.  Es una maravilla ver cómo nos robamos la palabra para revivir de nuevo esas sensaciones tan intensas que la lectura del mes nos ha provocado y disfrutar con inesperadas perspectivas y puntos de vista que nunca hubiésemos considerado… Leer es cantar, hablar, reír, llorar, gritar en silencio, eso es leer. Sumergirnos en un libro nos conmueve, nos llena y abre nuestras mentes. Leer mejora la concentración, el pensamiento crítico, la imaginación, la conexión entre ideas, desarrolla la empatía, la influencia y los valores. “La lectura es una herramienta para ayudarnos a vivir y a morir con un poco más de sabiduría, bondad y sensatez” Alain de Botton. Leer nos hace  libres y, precisamente, después de un día tan trágico como ayer,  recordamos esta frase tan lúcida de Federico  Mayor Zaragoza,  “La lectura es esencial para facilitar la transición de una cultura de fuerza, de imposición y de violencia a una cultura de tolerancia, entendimiento, de diálogo y de paz”.

Leer es libertad, es aventura, es disfrute, es transitar por mundos imposibles, vivir historias ajenas, también es reflexión y, en ocasiones, refugio. Cómo me reconforta encontrarme párrafos que parecen estar escritos pensando en mi…como si el autor  conociera mis heridas, mis sueños, mis derrotas. Me siguen encantando los recuerdos que todavía tengo de los libros de la infancia, esos que me hicieron asomarme por primera vez a experimentar el amor, la aventura o el miedo; me llena de satisfacción ver cómo mis hijos se han hecho lectores en mi regazo y compartir la ilusión con la que empiezan un nuevo libro y  las sensaciones cuando lo terminan y, sigo sin poder resistirme a las noches de lectura intensa, en las que no puedo soltar ese libro que me atrapa y a esos momentos en que un libro me deleita y me calma. “He buscado por todas partes el sosiego y no lo he encontrado sino en un rincón apartado, con un libro entre las manos” Tomás Kempis.

El regalo de este post son dos frases preciosas de Jorge Luis Borges:


Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro (Emily Dickinson) ¿Vamos? ¿Te apetece venir?
Feliz, feliz Semana Santa
Todos los besos